¿Qué es la Pseudoartrosis de Escafoides?
La pseudoartrosis de escafoides es una ausencia de consolidación del hueso escafoides de la muñeca tras una fractura. Es decir, en lugar de consolidar la fractura los fragmentos permanecen separados y móviles. Se habla de pseudoartrosis cuando han pasado más de seis meses desde la fractura y el hueso continua sin consolidar.
¿Por qué ocurre?
El escafoides es un hueso con una vascularización muy precaria. Por tanto, en función de la localización de la fractura y la energía del traumatismo es posible que la vascularización se interrumpa y sea insuficiente para su consolidación.
Factores como la gravedad y tipo de fractura, la demora en el diagnóstico y el tratamiento, así como el estado general del paciente pueden favorecer su aparición.
¿Qué síntomas produce?
Los síntomas de la pseudoartrosis de escafoides pueden incluir:
- Dolor: El dolor en la zona radial de la muñeca (bajo el pulgar) es un síntoma común y persistente, especialmente al realizar movimiento y fuerza.
- Inflamación: La zona radial de la muñeca puede presentar una inflamación crónica.
- Debilidad: La pseudoartrosis puede afectar la fuerza de puño, dificultando actividades incluso cotidianas.
- Limitación de la movilidad: Con el paso del tiempo la movilidad de la muñeca se ve limitada.
Si no se trata la pseudoartrosis, la muñeca puede entrar en un proceso degenerativo conocido como muñeca SNAC (Scaphoid Nonunion Advanced Collapse, por sus siglas en inglés). Este colapso carpiano hace que aparezcan cambios degenerativos en distintas partes de la muñeca y ya no sea posible el tratamiento del escafoides y sea necesario realizar cirugías paliativas (que incluyen la extracción del escafoides y la fijación de otros huesos carpianos).
¿Cómo se puede diagnosticar?
El diagnóstico de la pseudoartrosis de escafoides se realiza mediante:
- Exploración física: Se realizará una exploración para evaluar la localización del dolor, el rango de movimiento y la fuerza de puño.
- Radiografías: Las radiografías de la muñeca son esenciales para confirmar la presencia de pseudoartrosis y evaluar su gravedad.
- Tomografía computarizada (TC) o resonancia magnética (RM): Estas son dos pruebas fundamentales en el diagnóstico de la pseudoartrosis ya que definen el tipo de defecto óseo, la deformidad de los fragmentos, la necesidad de injerto y la viabilidad del hueso.
¿Cómo se puede tratar?
Una vez diagnosticada la pseudoartrosis, el tratamiento suele ser quirúrgico salvo que la situación del paciente (por edad o por patologías lo contraindique).
¿Cómo se realiza el tratamiento en nuestra unidad?
El tratamiento quirúrgico consiste en la resección del foco de pseudoartrosis, la estabilización de los fragmentos con un tornillo de titánio (osteosíntesis) y en la mayoría de los pacientes un injerto óseo (que se obtiene del radio de la misma muñeca o de la cesta iliaca).
En nuestra unidad tanto el desbridamiento como la osteosíntesis se realiza asistida por artroscopia. Es decir, a través de pequeñas incisiones que permiten acceder a la muñeca con el instrumental necesario sin tener que realizar un abordaje amplio.
Este tipo de tratamiento minimiza la lesión de los tejidos y favorece una recuperación más temprana y con menos dolor e inflamación.
En casos muy severos puede ser necesario realizar injertos vascularizados libres. En estos casos el injerto óseo se obtiene de la rodilla junto a una arteria que se sutura a una arteria de la muñeca para que el injerto tenga flujo sanguíneo.
Tras la cirugía será preciso un periodo de inmovilización que dependerá del tipo de pseudoartrosis y del tratamiento empleado.
El pronóstico una pseudoartrosis de escafoides varia de un paciente a otro y puede estar influenciado tanto por factores individuales, como la edad, la salud general, etc. como por el tipo y gravedad de la pseudoartrosis. Un seguimiento constante con el equipo médico y la terapia física, así como la atención a las indicaciones postoperatorias, son esenciales para una recuperación óptima. En algunos casos, pueden quedar secuelas de pérdida de movilidad, rigidez o dolor, pero en general muchos pacientes se consigue la consolidación de la fractura y una buena funcionalidad de la muñeca.
Recuerde que cada paciente y cada situación es única y su médico está para ofrecerle una atención personalizada a su patología. No dude en compartir cualquier preocupación o pregunta durante su consulta médica.